Andrea Godoy
Había reprobado dos veces el ejercicio del examen de grado (2do ejercicio). Cuando me recomendaron la tutoría, había perdido la confianza y la seguridad de que alguna vez lo aprobaría.
Cuando comenzaron las clases de preparación del grado, fui entendiendo los errores que había cometido y a la vez el profesor me fue entregando cada vez más confianza a la hora de contestar las preguntas.
Lo que más destaco de las clases con Jesús es su buena disposición a las diversas situaciones que se dan a diario, además de su disponibilidad 24/7 para cualquier pregunta que uno tenga.
Cuando llegó la hora de rendir el examen, al fin entendía lo que me preguntaban y ya no dudaba tanto a la hora de contestar. Solo me queda agradecer a la disposición y paciencia, ya que, gracias a él, al fin aprobé mi segundo ejercicio del examen de grado. ¡Ahora vamos por el tercero!